lunes, 20 de febrero de 2006

El sentido de MI voto

Estaba yo leyendo y reflexionando sobre el éxito de la manifestación del pasado sábado en Barcelona. Curioso el efecto que puede tener.

De entrada la ya habitual batalla de números, que si 65000, que si 125000, que si 1 millón. ¿Qué más da? Para mi, lo realmente esencial es que una gran concentración sin apoyo mediático, con la callada por respuesta de los grandes partidos catalanes y españoles y solamente convocada por entidades civiles (ERC se apuntó al final y colateralmente) ha sacado a la calle a una enorme cantidad de gente. Semejante poder de concentración está al alcance de pocos acontecimientos o entidades. Solamente el FC Barcelona, y casos excepcionales (terrorismo, guerra) han movilizado tanta gente. Pero es que entonces se trataba de llamadas que no dejaban indiferente y era difícil sustraerse al clima colectivo.

Debo reconocer que las manifestaciones no van conmigo. He asistido solamente a una (contra el asesinato de Ernest Lluch) pero tienen su misterio y sacuden conciencias.

En concreto esta última me sigue llamando la atención porque insisto, sin ningún tipo de apoyo ha congregado muchísima gente en la calle. Oficialmente el lema era "Som una nació i tenim dret a decidir". Dudo que todos los manifestantes asistieran al reclamo de esa proclama (como sin duda dirán los partidos políticos) pero el hecho es que mucha gente asistió, en un clima de sorprendente calma y alegría y sin el apoyo de los partidos tradicionales.

Aquí es cuando se me confirma una duda largamente madurada : ¿existe alguna sintonía entre los Partidos Políticos y la sociedad civil? Mucho me temo que no. Se habla de que el Estatut ha sido apoyado por el 90% de los representantes del poble català. Pues bien, la manifestación del sábado ha sido dejada de lado por 72% de los parlamentarios, y apoyada de forma muy sutil y leve por el otro 28%.

Cuando se hunde el Carmel, se habla del 3%, se debate al nivel de la basura sobre terrorismo, estatut, política económica, educación, etc. los políticos siguen a lo suyo. Y el pueblo a callar.

Pues yo ya no tengo más ganas de tragar. La legislación vigente concede a cada partido político con representación una asignación económica proporcional al número de votos obtenidos. Dado que no veo a NINGÚN POLÍTICO DECENTE en la escena actual, que todos los partidos se han alejado de forma despectiva de sus votantes, y que todo huele a podrido, he decidido que mi voto a partir de ahora, en plena conciencia de mis actos, y profundo dolor (he sido un votante convencido) pase a engrosar las filas del principal partido en España, a saber, la ABSTENCIÓN.

Se que aunque modesta, mi actitud les duele, entre otras cosas porque les toca el bolsillo. Quizá tengamos que empezar a tomar opciones más activas.

2 comentarios:

General Fórceps dijo...

Si se?or, Johnny!!!. Es la única opción válida, almenos hasta que el votar contra todos (el opuesto al voto en blanco) sea una realidad.
Por mi como si se mueren todos en accidente de góndola.
No nos merecemos esto.

Saludos,

CF

Johnny Tastavins dijo...

No haría falta llegar a votar contra todos. El voto en listas abiertas dejaría a más de uno con el culo al aire, y te garantizo que se preocuparían mucho más de nosotros.