De vuelta de vacaciones, apetece un poco comprobar que aparte del tópico "desconexión", han servido para observar, ver, comparar y concluir que las cosas ni son como nos las dicen ni como parece que deberían ser.
Lugar : Andalucía.
Asunto : Hotel.
Los hechos : un fulano inglés, con mucha pasta, se quiere construir una casa en zona rústica andaluza, terrenos que son, eso sí, de su propiedad. Solicita los permisos pertinentes al Ayuntamiento y le deniegan los permisos, ya que la finca rústica está calificada como suelo de equipamiento o rústico, no edificable.
Hasta aquí todo correcto. El detalle es que el individuo se entera que si bien no puede edificar una casita para su uso y disfrute, sí puede sin embargo edificar un hotel rural para el que dispondrá de generosas subvenciones. La condición es que debe emplear a 3 personas del pueblo donde se edifica, y por supuesto, destinar la construcción a hotel durante un mínimo de 10 años.
El colega lo plantea todo legalmente, obtiene una subvención 24 millones de las antiguas pesetas y edifica el hotel. En la actualidad, no ha contratado a nadie, y si llamas al "hotel" para pedir habitación las respuestas serán : "está completo" - casi siempre -, o bien te pedirán un importe que ni el Villa Magna de Madrid.
El tiempo pasa, y dentro de cuatro años cumplirá el plazo establecido, retirará la "H" de hotel de la puerta y tendrá su estupendo chaletito con una estupenda subvención de 24 millones pagada por todos nosotros.
Y yo con cara de bobo, de vuelta a Barcelona. Estupendo, no?
Lugar : Andalucía.
Asunto : Hotel.
Los hechos : un fulano inglés, con mucha pasta, se quiere construir una casa en zona rústica andaluza, terrenos que son, eso sí, de su propiedad. Solicita los permisos pertinentes al Ayuntamiento y le deniegan los permisos, ya que la finca rústica está calificada como suelo de equipamiento o rústico, no edificable.
Hasta aquí todo correcto. El detalle es que el individuo se entera que si bien no puede edificar una casita para su uso y disfrute, sí puede sin embargo edificar un hotel rural para el que dispondrá de generosas subvenciones. La condición es que debe emplear a 3 personas del pueblo donde se edifica, y por supuesto, destinar la construcción a hotel durante un mínimo de 10 años.
El colega lo plantea todo legalmente, obtiene una subvención 24 millones de las antiguas pesetas y edifica el hotel. En la actualidad, no ha contratado a nadie, y si llamas al "hotel" para pedir habitación las respuestas serán : "está completo" - casi siempre -, o bien te pedirán un importe que ni el Villa Magna de Madrid.
El tiempo pasa, y dentro de cuatro años cumplirá el plazo establecido, retirará la "H" de hotel de la puerta y tendrá su estupendo chaletito con una estupenda subvención de 24 millones pagada por todos nosotros.
Y yo con cara de bobo, de vuelta a Barcelona. Estupendo, no?
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2 comentarios:
Esto es verídico?? Flipo en colorines... aunque lo que no pase en este país... Está claro que al final siempre sale más rentable ir de espabilado corrupto; los honrados no se comen un colín... qué fuerrrrrrte!!!!!
@Low
Real como la vida misma. Simplemente escarbas un poquito y sale un manantial de historias. Andalucía es rica en corruptelas. Las peonadas darían para un libro.
@Rambla
De ahí la cara que se me queda, me falta el "morro" ...
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