jueves, 12 de marzo de 2009

Madrileñismo al desnudo

Me gusta Madrid. Siempre la percibí ciudad fascinante, divertida, abierta y elegante. Muchas veces he dicho que si un día me pierdo, probablemente me encuentren en Madrid. Se vive bien, se come bien, un lugar para disfrutar. Pero nunca dije que el paraíso existiera. Y Madrid, ¡ay! también tiene profundos fallos que disuaden la seducción que ejerce en mi la gran bruja mesetaria.

Viene a cuento todo esto porque es en Madrid donde se originan movimientos sísmicos que acaban afectándonos a todos. Madrid, la Capital, crea opinión, dirige, menosprecia, fulmina, ataca y destruye todo lo que no le plazca. Ha nacido una maldita clase periodística y mediática tan salvaje que parecen todos alacranes metidos en un tarro pequeño. Se muerden, se despellejan pero van a una contra el enemigo exterior.

Pobres de nosotros, catalanitos de la periferia, si se nos ocurre rebotarnos. O si el Barça gana títulos. O si pedimos lo que es nuestro. De repente se abren las fauces del monstruo y llegan improperios, ataques y descalificaciones. Atacan al nacionalismo con saña sin aceptar que ellos son los peores nacionalistas. Estoy esperando ver cómo descorchan botellas de cava (algunos de champagne, no olvidan el boicot) cuando el Tribunal Constitucional tumbe el Estatut.

Ahora se corren de gusto pensando que PSOE+PP echarán al PNV de la Lendakaritza del País Vasco. Y no les digas que eso son pactos contra natura. A ellos les parece bien, pues son buenos, punto y aparte. La aritmética manda cuando ellos así lo creen, pero es una aberración cuando otras opciones que no les gustan (por ejemplo el tripartito catalán) se imponen. Sientan cátedra en todo lo que dicen y saben. Saben de leyes, de política, de economía, de fútbol, de sucesos y de ¡Dios sabe cuántas cosas más! España es lo que ellos quieren, dicen y saben, los demás a callar y aceptar su centralismo jacobino. Se llenan la boca de España pero para ellos solamente es un apéndice de su terrenito, provincias que ellos llaman.


Fascinante la hipocresía que calzan cuando te pones a hablar con ellos. Todos son demócratas convencidos, tolerantes y respetuosos de las minorías. No hablan el catalán en la intimidad pero casi. Cuando pasa el rato, les das cancha y les sale la fiera que llevan dentro. Se van deslenguando y acaban retratados como lo que son : bravucones intransigentes sabelotodo.


Mención aparte se ganan a pulso los taxistas de Madrid. Casi debes pedir perdón por no ser de Madrid, y no tener puñetera idea si se llega antes a la Plaza España por San Bernardo o por la Glorieta de Bilbao. Te pregunta, contestas que no sabes, y la mirada de desprecio que te lanza a través del retrovisor no tiene precio. Siempre sintonizando la COPE o Carlos Herrera, con chulería extrema en el habla y la conducción. Madrid es una mierda mientras ellos te lo cuentan, pero no te atrevas a darles la razón, porque pasan a morder.

Alguien estará esperando que me meta con el Real Madrid, al que obviamente odio como buen culé. Pero no pasa de ser una rivalidad deportiva sana. Lo malo es cuando aparece el madrileñismo, con toda esa reata de periodistas deportivos infumables que pueden hacerte odiar a Gandhi. El Real Madrid como tal no me molesta.

Sentimientos que albergo, en fin, a pesar de que sigo adorando Madrid. Lo preocupante es que esta violencia emocional crece y crece y no parece tener límite. No sé si fuera de Catalunya se percibe ese ataque fiero y sistemático pero me da la sensación de que estamos perdiendo terreno que ha costado años ganar, y va a ser difícil, por no decir imposible recuperarlo.

4 comentarios:

monsieur le six dijo...

No es mi intención desanimarte, pero esperaba más de este artículo. Parece como si lo hubieras escrito deprisa y corriendo, y además las aclaraciones de que te gusta mucho Madrid dan la impresión (no digo que así sea) de querer ser diplomático y prevenir posibles "rebotes" por parte de algún madrileño ofendido. Pero sé que pronto volverás sobre la cuesión ;)

Algún día quizás escriba yo algo sobre el tema y ya aclararé mi punto de vista, pero sobre todo un punto que siempre recalco: una cosa es el madrileño (el ciudadano que ha nacido y vive en Madrid) y otra cosa es el periodista (o más bien tertuliano, porque periodistas de verdad quedan pocos), que a menudo no es ni de Madrid pero que trabaja en los medios asentados allá, cuyas directrices son las de los ataques y descalificaciones que mencionas.

Sin duda esos tertulianos (a los que no hace falta nombrar, porque todos sabemos de quiénes se trata) son realmente despreciables y un elemento de crispación permanente en España; pero el madrileño medio es, por mi experiencia, relativamente razonable, aún a pesar del continuo lavado de cerebro al que intentan someterle TeleMadrid, ABC, El Mundo etc.

En fin, cuando pueda ya hablaré sobre ello.

Johnny Tastavins dijo...

Joder, Madrid es para mi un tema tan complejo y dinámico que se me agolpan las ideas y los sentimientos. No es fácil plasmar lo que siento. Hay momentos en que todo fluye fácil y claro, otras veces, como cuando escribí este post no tanto.

Generalizar a todos los madrileños en general no es justo, lo se. Y lo que es peor es que los "madrileños" más agresivos no son naturales de Madrid, sirva como clamoroso ejemplo el ínclito Federico Jiménez Losantos, turolense de nacimiento y madrileño fanático anticatalista de adopción porque le pegaron un tiro en la rodilla en Barcelona. O el sabelotodo Pedro J. Ramírez. Te juro que no se de dónde era pero me temía que no de Madrid. Un rápido ojeo a la wikipedia me descubre sin sorpresa que es de La Rioja. ¡Qué bueno!

Ciertamente es un tema sobre el que hay que volver y no olvidar. Me sigue disgustando el provincianismo que se respira en esas tertutlias de radio y TV, en esos comentarios de prensa, en esos editoriales de El Mundo o del El País, donde todo lo que no huela a Madrid no vale.

Hostia, si es que han celebrado la semana pasada en IFEMA el Salón del Yate!!!

monsieur le six dijo...

En eso sí que te doy la razón. Los medios afincados allá (aún cuando sus periodistas no lo son) practican casi siempre una especie de "provincianismo al revés" según el cual todo lo que no provenga de "las provincias", todo lo que venga de fuera de su endogámigo universo, no vale, no tiene autoridad o es parcial y desinformado, cuando muy a menudo son ellos los desinformados y los que, pese a llenarse la boca cada día hablando de otros lugares, otras personas y otras sociedades, nunca se toman la molestia de conocernos e intentar comprendernos.

CONAN "THE BARBARIAN" dijo...

De lo mismo pero al reves tambien tenemos aquí.Nunca entenderé como les dais cancha, en forma de audiencia, a determinados personajes. La ignorancia , seguro que les duele más. ¡Ni por conocer sus intenciones,opinionesy/o hechos! ¡Pasar y pasar y volver a pasar! Que no se sientan importantes. Entonces sí estarán jodidos.
Independientemene del teme , decir que hace unos cuatro dias, me tocó hacer la mili en Madrid. Nunca negué ni tuve que hacerlo, mis origenes catalanes. ¡Faltaría más! En los 11 meses que anduve por aquellas tierras, siempre me trataron con respeto. Incluso más que a otros llegados de otros rincones. Solo me encontré con uno de esos que llamas "madrileños". Y por alusión directa, le tuve que reventar la boca. Ese "madrileño" que practicaba el "madrileñismo" , no cambió mi opinión del resto.
¡Ah! y yo tambien me corro de gusto pensando que la aritmética democrática impedirá al PNV gobernar, aunque sea por cuatro años en el País Vasco! Sea como sea. Aunque sea contra-natura.
Y por cierto, cuando llegaba a Madrid y bajaba del autocar, entre 3 o 4 , cojiamos un taxi para llegar al cuartel. Como se te ocurriera decirle por donde tenia que ir, ya la habias cagado. Bronca fija.
¡Como cambian los tiempos y las personas!
Saludos bárbaros.

PD: El Mundo Deportivo, y sobre todo el Sport, son un claro ejemplo de prensa deportiva imparcial y objetiva.¡¡¡¡¡No te jode!!!!!!