viernes, 29 de agosto de 2008

Finánciame otra vez


- Mamá, el pan que compras no me gusta ...
- Tranquilo Alex, a partir de mañana lo compras tú y así seguro que te gustará.
- Vale mamá, pero dame dinero para comprarlo, porfa ...
- No, no, encima que te dejo que lo compres, no pretenderás que lo pague yo, ¿no?
- Pero mami, con lo que me das, si me lo gasto en pan me quedará menos que a Dani, y encima el comerá del mismo pan!!
- Ayyyyyyyyyy, no seas malo y envidioso, anda. Compra el pan, que tu hermano es pequeño el pobre y no puede. ¿Sabes? Además, también te dejaré que compres las galletas.

Y luego el peque se compra la PlayStation3 con la pasta que ahorra, mientras que el mayor saca la lengua para pagar el pan, y las galletas, y lo que le vayan echando, y llegar a sus gastos con lo que le queda.

Y luego el pescado, o el bistec, o la Sanidad, o la Educación. Financiación con mayúsculas.

Lo que pasa es que esas palabras nos son lejanas, no se entienden. A ver, el único problema real que hay aquí, en palabras llanas, es que la Generalitat de Catalunya no tiene un puto duro. ¿Se entiende? ¿A que ahora sí? Pues a eso es a lo que hay que buscar solución.

Hay (se me ocurren) 4 posibles caminos a saber.

1. El Goberno Central cede una parte de su presupuesto a las Autonomías a fin de que estas puedan pagar sus competencias ampliadas. Zapatoner dice que nanay, a él no le tocan un duro de su caja. Tachada.

2. Las Autonomías con balanza fiscal favorable pasan a tenerla menos favorable (le tocaría más pasta a Catalunya en detrimento de otras Comunidades como Ceuta o la siempre nombrada Extremadura). LOFCA mediante, las Comunidades perjudiacadas por este camino ponen el grito en el cielo, y al grito de "multilateralidad" se oponen com gatos panza arriba a cualquier posible cambio. Tacahada la opción 2 (jo, va a ser difícl dar con el desatascador).

3. De nuevo acudiendo a la famosa LOFCA (ved, ved, el artículo 4), las Comunidades pueden tratar de incrementar sus ingresos mediante la creación de nuevos impuestos, poner más multas y si me apuráis, subiendo el precio de sus servicios (oseáse las tasas). Cualquier hijo de vecino ve muy clarito que el gobierno que se atreva a intentar incrementar los ingresos por esta vía tiene muy difícil repetir vicotria en las elecciones. Mierda, por aquí no vamos bien. Tachada esta también.

4. Last but nos least, y tal como diría Sherlock Holmes, una vez descartadas todas las opciones, la que queda es la buena, aunque parezca increible. Pues sí, tiene nombre (concierto) y apellido (cupo). Porque ambas son necesarias, el nombre sin el apellido no vale. No me vengan con historias constitucionales. Si vale para dos Comunidades, para el resto también. El enlace que os pongo es derechón, pero explica muy claritos los dos conceptos, recomiendo un rápido vistazo. En efecto, mediante el Concierto se recaudan los impuestos (no lo hace el Estado, lo hace la Autonomía, matiz importante) y en el Cupo se determina el precio de los servicios que el Estado presta en la Comunidad (a saber control de fronteras, guardia civil, servicios centrales del Estado, etc.) y se liquida ese precio al Estado. Por lo tanto, aquí el Estado nunca retorna la pasta, es que ni la huele. Lo siento, si ninguna de las 3 opciones antes apuntadas funciona, será necesario insistir, presionar y apostar sin dudas ni remilgos por esta última. Le pese a quien le pese.

¿Estamos de acuerdo?